Colores con los que trabajar, blumen, pequenas lunas de color distintas, handmade. Una por cada amor que se vuelve otra cosa, que muta, que se transforma.
Por la distancia y la cercania.
Por lo que unen las inquietudes comunes, la amistad.
Lo que es y será.
Lo que fue y es otra cosa.
El hilo de la lejanía permite limpiar el dolor.
Verlo todo desde un cristal que transparenta sólo la luz, sólo aquello que hace bien. Lo demás dejarlo fuera, innecesario el dolor.
Innecesario, con lo díficil que a veces la vida es de por sí.
Toda esa gente a la que quieres, pese a la distancia.
Y los cambios.